Hay muchos lugares que uno visita y es simplemente ir a los museos, conocer un poco el centro de la ciudad, algún punto famoso o turístico y probar platos típicos. O algo así.
También hay lugares que ofrecen mucho más aventura que una caminata por la ciudad, aunque es obvio que puedo caminar 20mil veces por las calles de Madrid o París o Nueva York y nunca me cansaré.
A continuación te cuento sobre 3 aventuras de viajes que me encantaron, que quizás se necesite un poco de entrenamiento físico antes de hacerlo, otros en donde puede ser una experiencia de fiesta, pero que a la final todas, me han parecido que valieron la pena y lo volvería hacer otra vez.
Hay muchos lugares que uno visita y es simplemente ir a los museos, conocer un poco el centro de la ciudad, algún punto famoso o turístico y probar platos típicos. O algo así.
También hay lugares que ofrecen mucho más aventura que una caminata por la ciudad, aunque es obvio que puedo caminar 20mil veces por las calles de Madrid o París o Nueva York y nunca me cansaré.
A continuación te cuento sobre 3 aventuras de viajes que me encantaron, que quizás se necesite un poco de entrenamiento físico antes de hacerlo, otros en donde puede ser una experiencia de fiesta, pero que a la final todas, me han parecido que valieron la pena y lo volvería hacer otra vez.
Tabla de contenidos
Manatíes en Florida
En Florida hay muchos lugares para visitar más que Miami u Orlando. El estado cuenta con muchos parques naturales con manantiales o para hacer un poco de senderismo, playas hermosas, museos, pueblos históricos y más.
El estado también es conocido por ser casa de muchos manatíes durante el invierno (especialmente entre noviembre y marzo). Pero ¿qué son esos animalitos? cariñosamente los conocen en inglés como ‘vaquitas del mar’ (sea cows) ya por lo grande que son, súper lindos, cariños y muy curiosos. Eso si, si te encuentras con una en el agua, no puedes tocarlos ni nada, ya que están protegidos por el estado… pero ellos probablemente, ya por ser curiosos, se acercarán a ti… no pasa nada, no son ni agresivos ni muerden ni nada.
Por ser un animalito bello que queremos mucho aquí en Florida, un paseo fue ir a nada con ellos en Crystal River, una pequeña ciudad al norte de Tampa. O como siempre digo, no fue tanto ‘nadar’ fue más flotar y disfrutarlos cerca, pero lejos. Tomamos un tour ya que nos llevarían a los lugares en donde normalmente uno los encuentra en su ambiente natural y no solamente eso, pero también nos explican un poco las normas y conocemos más sobre los manatíes.
De verdad que fue una experiencia hermosa y que nos gustaría repetir. No solamente vimos manatíes pero también las áreas por donde paseamos son muy bellas. Perfecto para un viaje de un día desde Orlando o desde Tampa ya que en auto es menos de 2 horas.
St. Patrick’s Day en Dublin
Quizás un poquito estresante ya que la ciudad se llena mucho que cuesta un poco ver y disfrutar los famosos puntos turísticos. Pero, desde que vivo en Estados Unidos, un poco más de 20 años, he estado celebrando San Patricio ya que es mi pre-cumpleaños :). No solamente eso, pero siempre me he sentido atraída por Irlanda y sus paisajes. Así que me dije que algún día iría a celebrar mi cumpleaños en Dublin y así disfrutarlo en grande (gracias a San Patricio). Y me fui con una de mis grandes amigas que su nombre es Patrizia… así que ¡perfecto!
Si, no pude conocer mucho en la ciudad ya que había mucha gente de todas partes del mundo y las esperas eran un poco insoportable.
Lo mejor que pudimos hacer fue tomar un tour de esos de ‘hop on hop off’ para conocer lo más que podíamos. Esos paseos son geniales ya que puedes usarlo como medio de transporte, escuchar datos interesantes y bajar y subir en donde quieras. Así fue como visitamos Guinness Storehouse y la Catedral de San Patricio que me pareció hermosa.
Claro, que si vas de fiesta es una excelente idea. Paseamos entre varios bares, incluyendo obviamente Temple Bar, bailamos, bebimos, disfrutamos la música tradicional irlandesa que siempre me parece divertida y conocimos montón de gente de todas partes del mundo. Eso sí, ya por esa celebración, hoteles obviamente van a estar más costoso que otras temporadas.
Me encantó visitar durante esa época, pasé un excelente cumpleaños, pero no se si regresaría para la misma celebración, pero si 100% a Dublín con un poco más de tranquilidad.
También, unos días antes de St. Patrick’s Day, nos fuimos hacia Cork para conocer otra ciudad y nos paseamos por la colorida Kinsale que vale la pena visitarla.
Parque Nacional Canaima
Esto realmente han sido 3 viajes, cada uno con detalles que jamás olvidaré y que regresaría para llenar más mi memoria de este increíble lugar al sur de Venezuela.
El Parque Nacional Canaima es la casa del salto de agua más alto del mundo, del Tepuy Roraima (o también conocido como Monte Roraima) y de los paisajes más hermosos y diferentes que puedes disfrutar.
En mi 1er viaje, lo hice con 4 amigos que ninguno de nosotros había ido anteriormente a la Gran Sabana, una enorme área del Parque Nacional Canaima. Simplemente nos tomamos nuestro tiempo en llegar al último pueblo antes de cruzar a Brasil, Santa Elena de Uairen, parándonos en varias cascadas, ríos y otros monumentos. Obviamente haciéndonos fotos constantemente.
En ese viaje hicimos rafting en el río Yuruani que fue una excelente experiencia. También nos hicimos amigos de uno de los guías que nos llevó a conocer otros puntos que quizás no hubiésemos llegado por nuestra cuenta. ¡Todo hermoso!. Nadamos en ríos, disfrutamos noches debajo todas las estrellas ya por estar en el medio de la nada, sin luz, vimos con facilidad hasta la Vía Láctea. De verdad que fue un maravilloso paseo.
En mi otro blog de viajes, puedes conocer más sobre ese 1er viaje con video y más fotos aquí.
Pero si pensaba que eso fue excelente, mi 2do viaje por el parque me dijo «hay más para enamorarse». Para mi 2do paseo, mi hermano (que ya había ido por el parque muchas veces) me dijo para visitar por 6 días el Tepuy Roraima.
Nuevamente, nos tomamos con calma la llegada hasta Santa Elena de Uairen, esta vez tratando de visitar saltos de agua y lugares que no había conocido anteriormente. La 1era noche nos quedamos en el Campamento Aponwao, que estaba prácticamente para nosotros ya por ser temporada baja. Al despertar, tomamos un paseo con un local por el río Aponwao que nos llevó hasta el salto con el mismo nombre. También se puede caminar, pero no teníamos mucho tiempo y necesitábamos relajarnos para la caminata de 6 días por el Roraima.
Continuamos por varios puntos hasta llegar a Santa Elena de Uairen. A la mañana siguiente comenzó la caminata hacia el tope del tepuy. Nos tomó 6 días en total, 3 para subir, pasamos 1 día completo en la cima (2 noches) y luego uno para bajar hasta el 1er campamento en donde pasamos la 1era noche.
Quedé súper agotada, mis piernas temblaban, no estaba acostumbrada a nada de eso, a pesar de que traté de entrenar un poco (1-2 meses antes) pero no fue lo suficiente. Pero es una de esas experiencias que escuchas «no vas a poder hacerlo» y al final solo quieres llorar de emoción porque SI lo hiciste y te sentiste de maravilla… bueno, cansada, pero ¡feliz!.
Si quieres conocer más sobre ese viaje y el recorrido con más fotos y video, aquí.
Y en mi 3er viaje no pasé por el área de la Gran Sabana. Para este me fui con una de mis tías hasta Ciudad Bolívar (al sur del país) para tomar un avión (de esos pequeños de 6 pasajeros y que hablas tranquilamente con el piloto) hasta Canaima. Canaima es un pueblito dentro del Parque Nacional Canaima.
Al llegar, tomamos una curiara (un bote que hacen los locales con la corteza de un árbol) por 4 horas por el río hasta llegar a la base del Salto Ángel.
Nos llovió gran parte del camino, pero esas vista hacía que no nos importara. Una vez en la base, caminamos por casi 1 hora hasta llegar a un punto desde donde vimos el salto mucho más cerca. Fue una de las mejores experiencias viajeras que he tenido. Y como Venezolana, pienso que aún más.
Esa noche la pasamos en un campamento base del salto, durmiendo en hamacas al aire libre. Yo solamente pensaba en culebras, sapos o los 20mil mosquitos que me iban atacar 🤣, pero dormí bien al final.
Luego regresamos a Canaima en donde visitamos otros saltos, obviamente más pequeños pero con sus encantos especiales, por ejemplo, pasamos por detrás de una de las cascadas y luego nos bañamos en una pequeña piscina natural. De verdad que genial y 100% recomendado para todos.
Aquí les dejo mi publicación con video sobre este increíble viaje.
La verdad es que cada viaje que realizo siempre me emociona y me alegra por mucho tiempo, en especial cuando los recuerdo. Pero hasta ahora, aunque he tenido mucho más experiencias viajeras inolvidables, estos han sido entre los más divertidos o entre alguna de mis metas que quería realizar. Son más destinos que tengo en mi ‘Bucket List’ y espero hacerlos realidad pronto.
Manatíes en Florida
En Florida hay muchos lugares para visitar más que Miami u Orlando. El estado cuenta con muchos parques naturales con manantiales o para hacer un poco de senderismo, playas hermosas, museos, pueblos históricos y más.
El estado también es conocido por ser casa de muchos manatíes durante el invierno (especialmente entre noviembre y marzo). Pero ¿qué son esos animalitos? cariñosamente los conocen en inglés como ‘vaquitas del mar’ (sea cows) ya por lo grande que son, súper lindos, cariños y muy curiosos. Eso si, si te encuentras con una en el agua, no puedes tocarlos ni nada, ya que están protegidos por el estado… pero ellos probablemente, ya por ser curiosos, se acercarán a ti… no pasa nada, no son ni agresivos ni muerden ni nada.
Por ser un animalito bello que queremos mucho aquí en Florida, un paseo fue ir a nada con ellos en Crystal River, una pequeña ciudad al norte de Tampa. O como siempre digo, no fue tanto ‘nadar’ fue más flotar y disfrutarlos cerca, pero lejos. Tomamos un tour ya que nos llevarían a los lugares en donde normalmente uno los encuentra en su ambiente natural y no solamente eso, pero también nos explican un poco las normas y conocemos más sobre los manatíes.
De verdad que fue una experiencia hermosa y que nos gustaría repetir. No solamente vimos manatíes pero también las áreas por donde paseamos son muy bellas. Perfecto para un viaje de un día desde Orlando o desde Tampa ya que en auto es menos de 2 horas.
St. Patrick’s Day en Dublin
Quizás un poquito estresante ya que la ciudad se llena mucho que cuesta un poco ver y disfrutar los famosos puntos turísticos. Pero, desde que vivo en Estados Unidos, un poco más de 20 años, he estado celebrando San Patricio ya que es mi pre-cumpleaños :). No solamente eso, pero siempre me he sentido atraída por Irlanda y sus paisajes. Así que me dije que algún día iría a celebrar mi cumpleaños en Dublin y así disfrutarlo en grande (gracias a San Patricio). Y me fui con una de mis grandes amigas que su nombre es Patrizia… así que ¡perfecto!
Si, no pude conocer mucho en la ciudad ya que había mucha gente de todas partes del mundo y las esperas eran un poco insoportable.
Lo mejor que pudimos hacer fue tomar un tour de esos de ‘hop on hop off’ para conocer lo más que podíamos. Esos paseos son geniales ya que puedes usarlo como medio de transporte, escuchar datos interesantes y bajar y subir en donde quieras. Así fue como visitamos Guinness Storehouse y la Catedral de San Patricio que me pareció hermosa.
Claro, que si vas de fiesta es una excelente idea. Paseamos entre varios bares, incluyendo obviamente Temple Bar, bailamos, bebimos, disfrutamos la música tradicional irlandesa que siempre me parece divertida y conocimos montón de gente de todas partes del mundo. Eso sí, ya por esa celebración, hoteles obviamente van a estar más costoso que otras temporadas.
Me encantó visitar durante esa época, pasé un excelente cumpleaños, pero no se si regresaría para la misma celebración, pero si 100% a Dublín con un poco más de tranquilidad.
También, unos días antes de St. Patrick’s Day, nos fuimos hacia Cork para conocer otra ciudad y nos paseamos por la colorida Kinsale que vale la pena visitarla.
Parque Nacional Canaima
Esto realmente han sido 3 viajes, cada uno con detalles que jamás olvidaré y que regresaría para llenar más mi memoria de este increíble lugar al sur de Venezuela.
El Parque Nacional Canaima es la casa del salto de agua más alto del mundo, del Tepuy Roraima (o también conocido como Monte Roraima) y de los paisajes más hermosos y diferentes que puedes disfrutar.
En mi 1er viaje, lo hice con 4 amigos que ninguno de nosotros había ido anteriormente a la Gran Sabana, una enorme área del Parque Nacional Canaima. Simplemente nos tomamos nuestro tiempo en llegar al último pueblo antes de cruzar a Brasil, Santa Elena de Uairen, parándonos en varias cascadas, ríos y otros monumentos. Obviamente haciéndonos fotos constantemente.
En ese viaje hicimos rafting en el río Yuruani que fue una excelente experiencia. También nos hicimos amigos de uno de los guías que nos llevó a conocer otros puntos que quizás no hubiésemos llegado por nuestra cuenta. ¡Todo hermoso!. Nadamos en ríos, disfrutamos noches debajo todas las estrellas ya por estar en el medio de la nada, sin luz, vimos con facilidad hasta la Vía Láctea. De verdad que fue un maravilloso paseo.
En mi otro blog de viajes, puedes conocer más sobre ese 1er viaje con video y más fotos aquí.
Pero si pensaba que eso fue excelente, mi 2do viaje por el parque me dijo «hay más para enamorarse». Para mi 2do paseo, mi hermano (que ya había ido por el parque muchas veces) me dijo para visitar por 6 días el Tepuy Roraima.
Nuevamente, nos tomamos con calma la llegada hasta Santa Elena de Uairen, esta vez tratando de visitar saltos de agua y lugares que no había conocido anteriormente. La 1era noche nos quedamos en el Campamento Aponwao, que estaba prácticamente para nosotros ya por ser temporada baja. Al despertar, tomamos un paseo con un local por el río Aponwao que nos llevó hasta el salto con el mismo nombre. También se puede caminar, pero no teníamos mucho tiempo y necesitábamos relajarnos para la caminata de 6 días por el Roraima.
Continuamos por varios puntos hasta llegar a Santa Elena de Uairen. A la mañana siguiente comenzó la caminata hacia el tope del tepuy. Nos tomó 6 días en total, 3 para subir, pasamos 1 día completo en la cima (2 noches) y luego uno para bajar hasta el 1er campamento en donde pasamos la 1era noche.
Quedé súper agotada, mis piernas temblaban, no estaba acostumbrada a nada de eso, a pesar de que traté de entrenar un poco (1-2 meses antes) pero no fue lo suficiente. Pero es una de esas experiencias que escuchas «no vas a poder hacerlo» y al final solo quieres llorar de emoción porque SI lo hiciste y te sentiste de maravilla… bueno, cansada, pero ¡feliz!.
Si quieres conocer más sobre ese viaje y el recorrido con más fotos y video, aquí.
Y en mi 3er viaje no pasé por el área de la Gran Sabana. Para este me fui con una de mis tías hasta Ciudad Bolívar (al sur del país) para tomar un avión (de esos pequeños de 6 pasajeros y que hablas tranquilamente con el piloto) hasta Canaima. Canaima es un pueblito dentro del Parque Nacional Canaima.
Al llegar, tomamos una curiara (un bote que hacen los locales con la corteza de un árbol) por 4 horas por el río hasta llegar a la base del Salto Ángel.
Nos llovió gran parte del camino, pero esas vista hacía que no nos importara. Una vez en la base, caminamos por casi 1 hora hasta llegar a un punto desde donde vimos el salto mucho más cerca. Fue una de las mejores experiencias viajeras que he tenido. Y como Venezolana, pienso que aún más.
Esa noche la pasamos en un campamento base del salto, durmiendo en hamacas al aire libre. Yo solamente pensaba en culebras, sapos o los 20mil mosquitos que me iban atacar 🤣, pero dormí bien al final.
Luego regresamos a Canaima en donde visitamos otros saltos, obviamente más pequeños pero con sus encantos especiales, por ejemplo, pasamos por detrás de una de las cascadas y luego nos bañamos en una pequeña piscina natural. De verdad que genial y 100% recomendado para todos.
Aquí les dejo mi publicación con video sobre este increíble viaje.
La verdad es que cada viaje que realizo siempre me emociona y me alegra por mucho tiempo, en especial cuando los recuerdo. Pero hasta ahora, aunque he tenido mucho más experiencias viajeras inolvidables, estos han sido entre los más divertidos o entre alguna de mis metas que quería realizar. Son más destinos que tengo en mi ‘Bucket List’ y espero hacerlos realidad pronto.